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miércoles, 7 de febrero de 2018

El hogar es la conciencia de que dondequiera que estoy, Dios está.


Al reflexionar en lo que la palabra hogar significa para mí, sé que no está limitada a un lugar externo. El hogar puede encontrarse en mi corazón. Mis pensamientos pasan de estructuras físicas a recuerdos y a las emociones que evocan.
Estoy en mi hogar cuando dirijo mis pensamientos a la vida divina en mí. Siento que me dan la bienvenida a casa cada vez que me dirijo a mi interior y me conecto con el Espíritu. Con mi atención centrada en la conciencia de mi unidad, me siento seguro y en paz. La búsqueda por mi hogar puede llevarme por muchos caminos, incluyendo la religión, estudios espirituales y la práctica de la meditación. Estas experiencias me enseñan que el hogar es la conciencia de que ¡dondequiera que estoy, Dios está!

Texto devocional:
Pero Dios es quien nos hizo para este fin, y quien nos dio su Espíritu.—2 Corintios 5:5


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